Clara Aguilera: «La unidad de Europa, como hasta ahora la hemos ido viendo avanzar, está en grave riesgo»

Socialista desde siempre y con carnet desde los 18 años, Clara Aguilera (Granada, 19) es la voz de los agricultores y del primer sector en el Europarlamento. Ella ha pasado de la política municipal a la europea, pasando por la Junta de Andalucía. De allí guarda un gran recuerdo de Manuel Chaves y Pepe Griñán. «Dos grandes presidentes socialistas andaluces y sobre todo grandes personas», asegura. Como otros europarlamentarios, rechaza que Bruselas sea un ‘cementerio de elefantes’ político y para demostrarlo ha puesto en marcha una web personal llamada ‘Tu voz en el escaño 305’. Defiende la agricultura ecológica aunque, en sus propias palabras, «esto no significa ningún cuestionamiento a la agricultura convencional que cada vez es más sostenible y competitiva». Referente a los transgénicos asegura que las normas de la UE son «suficientemente garantistas» para estar tranquilos, aunque su opinión se torna en preocupación cuando habla de la posibilidad de que Reino Unido abandone la unión. Lo que los medios han llamado ‘Brexit’.

Lo primero, ¿Cómo se acerca a la política? ¿Qué le lleva a afiliarse en 1983 al PSOE?

Ya desde muy joven tenía interés e inquietudes políticas una gran preocupación por las desigualdades de clase y romper con la herencia de la Dictadura franquista; mi padre y otros familiares ya eran militantes del Partido Socialista (histórico) y al comienzo de la Universidad en Granada empecé a participar en movimientos estudiantiles de izquierdas en la Facultad de Derecho granadina. A los pocos meses de cumplir 18 años solicite mi afiliación en la Agrupación local de la ciudad de Granada, a la que pertenezco desde entonces.

Su primer cargo público fue en 1996 como concejala del Ayuntamiento de Granada. ¿Qué destacaría de esa época?

Mi etapa en el Ayuntamiento de Granada, fue corta (tres años) pero intensa ya que la alternaba con mi trabajo profesional. Me gustaría destacar la cercanía que ofrece este ámbito local de la política muy cercana a la gente y sus problemas, a la par que considero que es la mejor fórmula de aprendizaje de la gestión pública y política. Inmediatez y cercanía son dos buenas palabras a resaltar de mi experiencia municipal.

De ahí salta al Parlamento Andaluz y a la política autonómica. Aumentan las responsabilidades ¿y también las dificultades?

Sí, en las elecciones autonómicas del año 2000 se me ofrece la oportunidad de ir en la lista granadina al Parlamento de Andalucía, en el que he estado catorce años siendo una gran experiencia para mí. En esa etapa he estado en el Gobierno andaluz ocho años, siendo los primeros cuatro Secretaria General de Relaciones con el Parlamento (Consejería de la Presidencia) y otros cuatro como miembro de los Gobierno de Manuel Chaves y Pepe Griñan en las Consejerías de Gobernación y Agricultura. Dos grandes presidentes socialistas andaluces y sobre todo grandes personas. Por supuesto, como me decías, aumentaron las responsabilidades y las dificultades ya que viví el comienzo y primeros años de la crisis económico-financiera de la que aún no hemos salido. Pocos recursos y muchas necesidades y demandas a las que atender. Duros y difíciles años, aunque apasionantes también.

Desde julio de 2014 es eurodiputada, ¿qué le diría a todos aquellos que piensan que el Europarlamento es un ‘cementerio de elefantes’?

Pues sobre todo que no es verdad, que quizás hace unos años se podía trasladar esa imagen al tener el Parlamento Europeo poca o nula capacidad de decisión, pero ahora tras el Tratado de Lisboa muchas políticas se deciden aquí para los Estados Miembros, y estos finalmente las ejecutan. El día a día de muchas decisiones que conforman y marcan la vida de las personas es debatido y decidido en las instituciones europeas. Tengo que decir también, que a esa mala imagen o a esa denominación que me señalas de ‘cementerio de elefantes’, han contribuido mucho las opiniones y decisiones de los partidos políticos en general.

¿Cómo describiría en pocas palabras la importancia de las medidas que discuten en Bruselas?

Antes ya lo he mencionado algo, las decisiones de las instituciones europeas (Parlamento, Comisión y el Consejo principalmente), marcan los principales temas que repercuten a la ciudadanía, decidiendo las prioridades globales de la UE, como el determinar la importancia de la austeridad, el pago de la deuda, o las medidas para salvar el sistema financiero europeo, frente a la priorización de las medidas de activación de empleo o de salvaguarda del Estado de Bienestar; por tanto una mayoría parlamentaria o de Gobiernos de la derecha o de la izquierda es muy relevante para que las medidas vayan en un sentido o en otro. Permíteme recordarles a vuestros lectores que actualmente hay una gran mayoría en ambas instituciones de la derecha europea y que ha marcado la acción política europea en la última década.

En cuanto a políticas, ha pasado por varias temáticas pero parece especializarse en agricultura. ¿Cree que es un sector olvidado?

Sí, mi especialización por la agricultura y la pesca, me viene de lejos ya que mi trabajo profesional ha sido en las cooperativas agrarias en las que trabaje más de diez años, especialmente como gerente de la Federacion Andaluza de Cooperativas Agrarias (FAECA Granada). No pienso que sea este un sector olvidado, sino que quizás por su desconocimiento no ha sido priorizado como corresponde a su importancia social y territorial por los partidos políticos y hablo en general, claro está que cuanto menor es el ámbito de actuación de la organización política mayor peso y protagonismo cogen las políticas agrarias o agroalimentarias y las pesqueras. Aunque tengo que decir que, afortunadamente, esto ya está cambiando positivamente en mi partido.

¿Cuáles cree que son las necesidades más imperiosas de los agricultores? Usted se ha declarado gran defensora de los productos ecológicos. ¿Está reñida la producción ecológica al crecimiento económico?

No, soy gran defensora si me lo permites de la agricultura y la pesca como actividades económicas imprescindibles para la cohesión territorial y el mantenimiento de las zonas rurales europeas, y por tanto defiendo que es necesario el mantenimiento y el apoyo público a que estos profesionales tengan una renta digna que permita su supervivencia. Y dentro de ese modelo pienso que la agricultura ecológica europea, ahora en debate de una nueva normativa que la regule, va a jugar un papel importante en las prioridades de consumo de los europeos en el futuro. Esto no significa ningún cuestionamiento a la agricultura convencional que cada vez es más sostenible y competitiva.

¿En qué situación deja esto a las semillas transgénicas?

El debate de los OGM (transgénicos) en general levanta en mi opinión muchos debates contradictorios, pienso que la gran mayoría de los ciudadanos desconoce lo que es un ‘producto transgénico’. Mi opinión es que, actualmente, tenemos una normativa europea que es lo suficientemente garantista para que tengamos la absoluta tranquilidad en cuanto de la utilización de semilla transgénica, de los pocos usos permitidos en la UE. El principio de precaución europeo ofrece garantías para determinar la posibilidad de la entrada de productos en la cadena alimentaria. Creo y apuesto por la innovación en los sectores agroalimentarios, con la salvaguarda que nos ofrece la normativa europea, también en el caso de las semillas transgénicas.

Otro asunto reclamado por los ecologistas es el tema de los pesticidas y su relación con la muerte de abejas, imprescindibles para los cultivos y la vegetación. ¿Cómo afrontan este problema desde el PSOE?

Lógicamente con preocupación, hay graves problemas de muerte en las abejas con algunos productos y lo que ello supone para el mantenimiento de la biodiversidad y los ecosistemas. Estamos participando en grupos de debate y trabajo para ver cuáles son las medidas que se deberían tomar.

Usted puso en marcha su web bautizada como ‘Tu voz en el escaño 305’. ¿Están lejos los diputados del Parlamento Europeo de los ciudadanos? ¿Cree que se aprecia así?

Sí, así es sin duda la distancia geográfica no ayuda a lo contrario que sería la cercanía, en mi trabajo utilizo las redes sociales para acercar las decisiones, opiniones y agenda de mi trabajo como Eurodiputada, también mi web claraaguilera.es, son un instrumento más útil para ello. No obstante, creo que para la mayoría de la ciudadanía las decisiones de Bruselas o sus debates, lo perciben con lejanía y se encuentran ajenos a ellos, por eso es importante el trabajo de cercanía que podamos ofrecer los diputados en nuestros países. También ayudaría mayor divulgación de los medios de comunicación no solo nacionales, sino regionales, provinciales o locales. De cualquier modo, debemos en general las personas que estamos en la política hacer un mayor esfuerzo por dar crédito a nuestro trabajo para su mejor valoración por la opinión pública española, y esto es para todos los ámbitos.

La mayor parte de la información europea viene de la mano de crisis de refugiados, además de esta ¿qué otros retos cree que afrontará Europa en los próximos meses?

No se ha resuelto la crisis griega, tampoco acabamos de salir de la crisis económica y las salidas que vemos son en deterioro del Estado de Bienestar Europeo y por supuesto el surgimiento de movimientos contrarios a la UE, empeñados en acabar con ella, especialmente en algunos Estados Miembros, o la situación enmarcada con el referéndum Británico y el acuerdo ofrecido por el Consejo para sigan como miembros de la UE.

Usted ha escrito sobre el ‘Brexit’, ¿está en riesgo la unidad de la UE?

Sí, pienso que la unidad de Europa como hasta ahora la hemos ido viendo avanzar está en grave riesgo, espero que entre todos consigamos señalar una senda diferente para ello es importante un Gobierno de progreso en España.

Por último, ¿cómo lleva estar tan lejos de su Granada natal?

Sinceramente regular, soy muy de mi tierra adoro Granada y no me gusta vivir en otro sitio. Por tanto, procuro adaptarme cómo puedo. Eso sí: voy y vengo semanalmente a mi casa granadina.

 

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